viernes, 27 de julio de 2012

Sumatra central "La Jungla"


Berastagi es un pueblo de  montaña donde viven los Karo, se encuentra a mitad de camino entre Medan y el lago Toba, nuestra siguiente parada. Pero decidimos hacer noche en este pueblo intermedio para subir a su volcán humeante, el Gunung Sibayak de 2100 m.
Al llegar vimos que la ciudad era muy turística, normalmente frecuentada por turistas indonesios que van a pasar el fin de semana en la montaña, ya que el clima es bastante cómodo, fresquito durante la noche y perfecto durante el día, en este tipo de ciudades me impresionó ver parques de atracciones y mercados diseñados para los turistas donde venden frutas de todo tipo, cacahuetes húmedos, conejos, perros, pollos de colores y ratoncitos que corren en un circulito que da vueltas sin parar.

Esa noche nos quedamos en un hostel de camino al volcán, un lugar muy cómodo con agua caliente, que regenta un holandés jubilado casado con una indonesia, el tipo es de lo mas curioso, se te quedaba mirando cuando le preguntabas algo y no te respondía como si no te hubiese entendido, a la tercera pregunta ya nos dimos cuenta y paramos de preguntarle más, solo lo decíamos, more coffe? El café estaba buenísimo, eso si lo entendía y nos lo traía sin rechistar, eso fue lo mejor de nuestra estancia  allí.
A la mañana siguiente nos dirigimos al volcán, el total de la escalada eran 3 horas de las cuales 2.30 eran por carretera y el resto por un caminito de tierra que llegaba al cráter, lleno de basura, bolsas de plástico y porquería de todo tipo. Al llegar al cráter vimos que salía humo de varios lados y el olor a azufre cada vez era más fuerte, echamos unas fotillos, hicimos un video para felicitar al padre de Guillem para su cumple, comimos y nos fuimos para abajo por el otro lado del volcán que nos llevaría hasta unas aguas termales bastante chulas, con 6 piscinas de diferentes temperaturas, allí nos relajamos hasta que nos fuimos para Berastagui otra vez, esta vez con suerte, en un remolque de una pick-up for free.


Para ir al lago toba, decidimos hacer un pekin express, nos dividimos en parejas y intentamos ir haciendo autostop hasta Parapat, la ciudad desde donde sale el ferry hasta la isla que hay en medio de el lago, donde dormiríamos aquella noche si llegábamos a tiempo. La aventura empezó con suerte, enseguida un coche nos paró a los 4 y nos llevó hasta un pueblo a media hora, allí empezamos a buscar otro coche y empezó la gente a venir sin parar a preguntarnos qué hacíamos, que porque no pillábamos un autobús, que era lo normal. Pero nosotros seguíamos con el dedito hacia arriba esperando el coche o furgoneta, pero después de 1 hora y de no conseguir nada, decidimos ir en autobús, ya que teníamos que llegar a la isla esa noche y no iba a ser nada fácil llegar. Así que al final el juego, nos duró 3 horas la ilusión.

El lago toba según cuentan los libros, se creo hace millones de años por la explosión del volcán que tiene debajo, de hecho es un cráter inmenso, lo curioso es que después de otra explosión posterior se creó la isla donde estuvimos 5 días. Allí viven los Barak otra tribu diferente con otro idioma diferente, los barak son gente muy orgullosa, no les puedes discutir nada, si lo quieres bien, y si no, no lo cojas.  Es un poco aburrido no poder ni siquiera regatear un poquito.

El clima no nos acompañó demasiado y llovía cada día, aunque fuese por 15 minutos, pero llovía, así que pasamos unos días muy relajados en el lago. Un día alquilamos una moto y nos fuimos  a unas aguas termales que estaban en la otra punta de la isla, de camino pudimos visitar, sus famosas casas con una arquitectura muy peculiar y sus tumbas cristianas situadas cerca de las casas como panteones muy señoriales, todo depende de tu situación económica y social para tener una tumba más elegante o menos. Las termas no eran nada del otro mundo, pero el camino se hizo muy divertido, pasando por los pueblos y conduciendo las motillos por esas carreteras tranquilas, pudiendo disfrutar de los paisajes selváticos del lugar.

Esa misma noche era la final de la Euro Cup, así que nos fuimos al bar y disfrutamos de la cómoda victoria que tuvimos frente a los italianinis, por suerte teníamos a una italiana cerca para cachondearnos un poquito. Otro día decidimos ir al monte a probar las setas que crecen salvajes por estos lares, y no nos dimos cuenta y acabamos en una boda típica Barak viendo como tienen que aguantar los pobres novios a conocer a toda, y cuando digo a toda es a toda la familia del afortunado/a o desafortunado/a, menudo coñazo, se tiraron todo el rato que estuvimos llamando a gente con un micrófono  y tirándole arroz a la novia por encima de la cabeza y después sin saber porqué, se pusieron todos en fila india y le pusieron interminables pañuelos por encima de los hombros a los padres de los novios, tantos que les taparon todo el cuello, tenían que quitarles para que no les diese algo, todo esto a ritmo Camela indonesia.


No sabíamos donde ir, o a Nias que son unas islas en el noroeste de sumatra o a las Mentawai en el centro oeste. Los dos lugares eran buenos, pero teníamos que decidir uno. Al final decidimos ir a Mentawai a visitar a las tribus de este lugar y así poder tener oportunidad de ver las mejores olas del mundo para surfear. Y mientras esperábamos nuestro siguiente viaje montamos nuestra cuerda floja y estuvimos todo el día practicando a ritmo de musiquita española y haciendo malabares con los palitos, tipo Thailandes.

Ya al día siguiente nos dirigimos hacia Padang nuestro siguiente stop, para ir hasta las Islas Mentawai, lo que no sabíamos es que teníamos que estar 21 horas en un coche hecho para indonesios enanos, por carreteras destrozadas llenas de agujeros y a una velocidad máxima de 60 km hora, menos mal que los compañeros de viaje eran agradables y nos dejaron cambiar de sitios durante varios momentos. Si lo llegamos a saber vamos en avión, pero bueno esto sucede por ir como el viento.


ORANG UTAN!!!


La “Persona de la jungla”, vive desde hace muchos cientos de años en las junglas de Sumatra y borneo, siempre han vivido libremente, pero poco a poco cada día su hábitat se ha visto reducido por la urbanización del hombre moderno, viéndose obligados los gobiernos a crear parques naturales con el fin de que puedan seguir viviendo libremente. Este es el caso de Bukit lawang, el único parque natural de sumatra donde se pueden encontrar estos enormes primates de hasta 90 kg de pelo rojo y cara divertida, en realidad según nos dijeron en el parque existen unos 7000 repartidos entre sus fronteras.

Sus cuatro manos les ayudan a moverse de árbol en árbol con una  agilidad únicas, no son tan rápidos como los monos saltarines pero avanzan subiéndose a las partes más altas de los árboles y balanceándose de uno a otro, pudiendo avanzar muchos metros  en un solo paso, te crees que están lejos y cuando te das cuenta ya los tienes encima mirándote con esa cara inexpresiva pero llena de sentido.

Este parque natural tiene mucha fama y recibe muchos turistas a lo largo del año, se podría decir que es la atracción principal de Sumatra, así que los orang-utan que solemos ver los que los visitamos, están acostumbrados a que les den de comer los guías que nos acompañan. Existen leyendas de ataques a turistas y de algunos que son bastante violentos, pero los guías saben perfectamente cómo tratar con esos problemas, es muy difícil que pase algo. El treking standard trata de 2 días por la jungla, el primer día se andan unas 7-8 horas pero parando cada hora, ya que los orang-utan van apareciendo sin parar, el primer grupo que vimos estaba a tan solo 40 minutos de empezar a caminar y eran 6, todas hembras con sus hijos de paseo por la jungla, es muy divertido ver como juegan entre ellos y se mean encima de los turistas. En realidad en cada lugar donde los grupos de personas se paran para descansar y/o comer algo, aparece un orang-utan buscando comida. Una vez el orangután bajo del árbol y empezó a andar hacia nosotros, hasta que se puso tan cerca que pudimos tocarlo, pero antes empezamos a correr asustados pensando que venía a atacarnos, pero los guías nos dijeron que lo único que querían era la comida y estar con nosotros un rato. El día paso rápido muy ameno y divertido, caminando por la jungla viendo, monos, tortugas, pavos reales, hormigas gigantes, arboles enormes y plantas útiles para múltiples usos. Y ya casi al final el Macho dominante se nos apareció posando colgado de un árbol, impresiona ver a un bicharraco de ese tamaño a tan solo 5 metro mirándote fijamente a los ojos, sin saber que es lo que está buscando.

Ya llegamos al final del treking con un descenso empinado y resbaladizo que bajaba al camping que estaba situado en una ribera preciosa con la jungla y un rio con aguas cristalinas. Allí nos bañamos y descansamos hasta que llegó la hora de la cena, el té y la hora de dormir. En la jungla no hay comodidades y tenemos que dormir, claro, en el suelo con un techo de plástico que nos protegía de la lluvia. Esa noche un iraquí dormía a mi lado, era una persona muy curiosa y divertida, cuando estábamos acostados ya esperando a cerrar los ojos, nos pasaron por delante, unas ratas de monte y alguna cucaracha y el iraquí entro en pánico no acostumbrado a esas situaciones y no se le ocurre otra cosa que decirme que se quería ir a un hotel, yo muy serio le dije que se lo preguntase al guía y el todo envalentonado va y se lo pregunta, todo el mundo empezó a reir… claro, en la jungla no hay hoteles. Al final se durmió y a la mañana siguiente vio que seguía vivo con ojos, piernas y sin ninguna enfermedad rara.

El segundo día de treking empezó con un desayuno buenísimo con galletas dulces y un sándwich de tortilla que nos comimos muy a gusto, y después nos dirigimos por la selva hacia unas cascadas perdidas donde también pasamos un buen rato con los masajes del agua. Nos bañamos en el rio y saltamos desde unas rocas como buenos aventureros, y al rato ya nos tocaba la vuelta a bukit lawang pero esta vez de tubing, con unas cámaras de rueda de camión hinchadas nos tiraron rio abajo durante dos horas por los rápidos no tan rápidos, pero nos lo pasamos genial chocando con todas las rocas que se cruzaban en nuestro camino y volcando alguna vez sin consecuencias.

Así pasaron nuestros dos días de treking por la jungla con los orang-utan, una experiencia  única e inolvidable que recomiendo a todo el mundo que tenga oportunidad de visitar Sumatra!!!

miércoles, 25 de julio de 2012

SUMATRA la bienvenida!!! excuse me?

Desde Malaka Malasia, cruzamos el estrecho llamado igual que la ciudad patrimonio de la humanidad, en un barco ratonera que viéndolo y estando allí te das cuenta de lo muy posibles que son los multiples desastres ocurridos en indonesia con los ferris. Barcos diseñados con muy poca idea en caso de evacuación, coincidiendo todos los pasillos de las 3 salas donde los pasajeros se sientan esperando llegar a su destino en asientos igualmente diseñados para los cuerpecitos asiáticos. Nosotros nos fuimos a cubierta, por si a caso.

llegamos a Dumai Indonesia la única ciudad por donde se puede llegar desde otro país a Sumatra via marítima. El país de las 17000 islas, de las cuales la tercera parte están inhabitadas, un país con más de 500 idiomas y 250 millones de habitantes, el país con más musulmanes del mundo, Indonesia es el país de los superlativos.
Nada más entrar, me di cuenta que iba a ser totalmente diferente a los demás países de Asia que había visitado en este viaje, casas bajas y destartaladas con techos de ojalata oxidado, calles descuidadas y llenas de basura, muchas vegetación alrededor y muchas, muchas motos circulando sin sentido marcado por normas de tráfico. Al llegar a la estación de autobuses que nos llevaría a nuestra siguiente parada Medan, unas chicas de unos 11 años aproximadamente con el pelo tapado con los típicos velos musulmanes, nos vinieron directas y nos preguntaron si teníamos tiempo para ir a su escuela de ingles para ayudarles a practicar, y después de mirarnos sorprendidos, decidimos ir. La escuela estaba en el centro de Dumai, nos llevaron en un bus público pagado por el profesor de la escuela, un indonesio de mediana edad que motiva a los alumnos trayendo a turistas a las clases para que practiquen su inglés y luego tengan la opción de conocerles un poco más, ofreciendo acomodación gratis en su casa. A nosotros nos la ofreció y después de hacer la primera clase, aceptamos el quedarnos una noche y irnos hacia medan al día siguiente. Las clases se trataban ni nada más ni nada menos en sentarse y escuchar presentarse a los alumnos, diciendo su nombre, su nombre de pila, su edad, donde estudiaba, que curso, sus hobbies y su objetivo en la vida. Luego se presentaba uno mismo y a partir de hay empezaba el feroz y inacabable “Excuse me!!!” “Excuse me!!! Whats your favorite…..?” después de 10 ya no sabias donde meterte.  Esa misma noche los alumnos más mayores de entre 16 y 30 años nos invitaron a salir a cenar para celebrar el cumpleaños de Anne, y incluso la regalaron un gorro y un collar “super mono” digno de cualquier fiesta de alto standing. Al día siguiente ya las clases se hicieron bastante pesadas ya que no sabíamos que hacer ni que decir, incluso los alumnos ya se habían cansado de nosotros, no los mayores que la verdad hicieron muy bien de anfitriones, tanto que al final ya no sabíamos dónde meternos, pero no se les puede dar más que las gracias por tratarnos así de bien. Así que ya entrada la tarde empaquetamos y nos fuimos a la estación de autobuses, donde nos esperaban 12 horas hasta medan, la ciudad más grande de Sumatra situada en la costa este del país.

Sumatra es una isla enorme, tan grande como España pero donde las carreteras están hechas una autentica porquería, estrechas y llenas de baches, hecho que hace que los vehículos no sobrepasen los 60 km por hora así que un viaje de 150 km puede llegar a durar 2 y casi 3 horas. Un palizón a valorar cuando se planea visitar esta isla, casi siempre sale más a cuenta volar que viajar por tierra.

Medan no es una ciudad interesante, en absoluto, pero nosotros hicimos una noche esperando la llegada de Jon, un Vasco que estuvo viajando con Guillem durante dos meses en Laos y Tailandia, el también había empezado en viaje cuando yo, así que llevaba 10 meses viajando por India, Nepal, el Sur Este asiático y ahora venía de Australia. Su llegada nos sentó a todos muy bien,  es una persona positiva y muy energética, enseguida el grupo se hizo a él y el al grupo, a partir de Medan ya éramos uno más.
Así que de camino a visitar a los Orang-utan!!!